El exceso de contaminación del aceite lubricante puede tener dos orígenes: interno y externo. Existen una serie de contaminantes como el polvo externo, agua o humedad que se generan en el exterior y que provocan la contaminación del aceite lubricante.
Otros son contaminantes de origen interno, inherentes a las funciones que cumple el fluido de lubricación dentro de la máquina y que no se pueden desligar de su funcionamiento. Estos son productos de degradación o partículas de desgaste de la propia máquina. Incluso fluidos de refrigeración, que pueden originar contaminaciones indeseadas.
Existen, por tanto, una serie de procesos externos al propio funcionamiento del aceite que pueden agregar contaminantes y otros que aparecen como una derivada del propio proceso de producción.
Contaminación interna
El proceso industrial constituye en sí mismo un foco de contaminación para el lubricante.
Una de las labores del aceite es la de limpiar las zonas de trabajo en la maquinaria. En este proceso, el aceite elimina las impurezas que pueden afectar a los componentes de la maquinaria, pero también las arrastra y las transporta hacia los filtros para eliminarlas completamente del sistema de lubricación. Estas partículas no solo lo ensucian, sino que entran en circulación por todo el sistema y pueden provocar el desgaste acelerado de los componentes y, en consecuencia, averías.
Es el caso, por ejemplo, de los motores diésel. El aceite ha de enfrentarse, además de a las partículas de desgaste, al hollín que se genera inherentemente durante la operación. No se trata de un agente externo que provenga de un mal funcionamiento, sino que se genera como parte del propio funcionamiento del motor.
En el caso de las máquinas refrigeradas por agua también puede resultar una fuente de contaminación, debido a que el agua y el aceite se encuentran muy cerca en el área de trabajo. Al contrario de lo que se afirma, el agua y el aceite sí se pueden mezclar, si se produce una fuga de uno de los compartimentos al otro. Por ejemplo, en industrias como la papelera, la contaminación por agua es un elemento inherente al proceso de producción.